ESPACIOS CERRADOS. Lo idóneo es contar con un estudio geobiológico donde se analizarán no sólo los campos electromagnéticos sino también las corrientes telúricas (fallas, corrientes de agua,..). Respecto a las altas frecuencias, dentro del edificio habría que evitar los sistemas inalámbricos (wifi, teléfonos inalámbricos,..) tanto propios como ajenos. Respecto a las bajas frecuencias, me gustaría destacar las claves de las instalaciones eléctricas de la vivienda:
-Deberemos tener unos buenos valores en la toma de tierra.
-Todo habrá de estar conectado a tierra, desde los enchufes a las lámparas y los puntos de luz, así como la estructura metálica de la vivienda (obligación legal).
-Los suelos de madera que carecen de forjado de hormigón transmiten toda la electricidad del cableado de la luz del techo de la planta inferior. Por ello, aconsejo colocar los puntos de luz de las plantas inferiores en la pared.
-Que no estén todas las paredes cableadas (mejor dejar las externas exentas).
-Atención especial al dormitorio: no colocar cableado ni puntos de luz o enchufes en la pared de la cabecera de la cama. De ser inevitable, el cable será blindado. Tampoco colocar lámparas encima de las camas.
-Las lámparas pueden apantallarse o comprarse ya apantalladas. Un bioelectricista os lo hará. Y si se lo explicáis a un buen electricista, también os lo puede hacer.
Todos estos consejos son el resultado de los ensayos y errores en el ámbito del hogar de la autora del blog, donde se medían los campos, se aplicaba una solución y se medían los campos otra vez.
No podemos abstraernos de la necesidad de que un entorno sano ha de contar con poca contaminación derivada de las pinturas, barnices, tejidos, tráfico de vehículos,..
Os recomiendo el artículo del bioelectricista Giovanni Santi: http://www.bioelectrica.es/salud-en-casa-y-los-campos-electromagneticos/
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